Mientras Jake estaba intentando contarle al Capitán la buena noticia, este le seguía insultando más todavía. El Capitán, viendo que Jake no paraba de interrumpirle, mientras él hablaba, pegó un brinco de la cama, y miró a Jake fijamente a los ojos con un carácter malvado, y le dijo:
-Jake, como quieres que te escuche si tu a mí no me has hecho ningún caso.
-Y Jake respondió: Lo sé capitán, pero es muy importante lo que tengo que decirle.
-Confiaré en ti, ya puedes decirlo, pero como no sea nada importante, te castigaré pasando por la tabla.
-Sí, si, Capitán, no es importante, es importantísimo, escuche con atención:
-¡La bandera francesa está flotando en el agua! ( El Capitán se quedó sin palabras)
-Bueno Jake, ¿ y por qué no me lo habías dicho antes?, desde luego siempre avisas en el último momento. Pero tengo que reconocer, que es una gran noticia, ¡deprisa, se lo tenemos que contar a toda la tripulación que parece que se los ha tragado la tierra!
¡Corre, deprisa! ¿ A qué esperas?
Jake se quedó fijamente mirando al capitán, y salió corriendo de su habitación para encontrar a toda la tripulación. Primero, pensó decírselo a Peter, que la última vez que lo pudo ver fue cuando fue a la cocina.
Jake, fue a la cocina muy emocionado, pensando en la cara que pondría Peter al escuchar esta noticia. Fue a la cocina, pero... Peter... no estaba allí.
Jake se puso nervioso y pensó: ¿ Qué le habrá pasado a Peter, lo habrá pillado el camarero y le habrá cortado el brazo? Me temo lo peor.
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